¿A que no adivináis cual ha sido?.
¿Una palabra elegante como "celosía"?. ¿Tal vez un vocablo culto como "idiosincrasia"?.
Pues no... ha sido ¡Cocacola!. La verdad es que me encanta esa sensación fresca y burbujeante de la cocacola sin azucar ni cafeína. Aunque no es cocacola de verdad lo que me dan, sino de esa del Mercadona, pero bueno... a caballo regalado no le mires los cataplines.
sábado, 27 de febrero de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
2 comentarios:
Grábalo, se lo mandas a CocaCola Company y te forras!
Publicar un comentario